Unas 720.000 personas viven como desplazadas en América a causa de los desastres

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En 2023 se registraron en el mundo 47 millones de nuevos desplazamientos para elevar el número de personas viviendo en situación de desplazamiento interno a 75,9 millones a finales de año, un récord que enfatiza la urgencia de proteger a esa población y de prevenir más movimientos de ese tipo, señala el nuevo informe del Centro de Monitoreo del Desplazamiento Interno.

En el continente americano, se documentaron 2,6 millones de desplazamientos internos en 2022, en comparación con los dos millones de 2021. Casi el 80% debido a los desastres. Brasil y Estados Unidos, países propensos a esas catástrofes y con poblaciones extensas, sumó cada uno un tercio de ese dato.

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Según una nota publicada en el portal web de la ONU, al final del año, cerca de 720 mil personas vivían en situación de desplazamiento por los desastres que asolaron la región.

Estados Unidos registró tres cuartas partes de ese total, pero eso se debe en parte a que la mayoría de los países de la región no hacen un seguimiento de los desplazamientos por desastres una vez que ha pasado la fase inicial de la crisis y carecen de datos sobre el desplazamiento prolongado.

En 2023, catástrofes como el Ciclón Freddy en el sureste de África, los terremotos en Turquía y Siria, y el Ciclón Mocha en el Océano Índico provocaron 26,4 millones de movimientos, el 56% del total de nuevos desplazamientos internos. Además se observó un incremento en desplazamientos inducidos por los desastres en países de renta alta como Canadá, en donde una temporada de incendios forestales sin precedentes provocó 185.000 desplazamientos internos.

La Organización Internacional para las Migraciones advirtió que la cifra de personas desplazadas por los desastres aumentará en los próximos años puesto que la frecuencia, duración e intensidad de los peligros naturales empeora cada vez más a causa del cambio climático, como se ha comprobado en las últimas semanas en Brasil y Kenya.

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