El Gobierno de Argentina descartó el martes que hubiera sobornos o conductas contrarias a la ética pública en el caso de las criptomonedas que salpicó al presidente ultraliberal Javier Milei por una posible estafa y golpeó a los mercados.
El escándalo, que amenaza con convertirse en una crisis política, se disparó cuando el mandatario promocionó el viernes en un tuit una criptomoneda desconocida llamada $LIBRA que, tras trepar de valor en pocas horas, se derrumbó.
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«Es insultante» pensar que hubo sobornos para el Gobierno, señaló en una conferencia de prensa el portavoz presidencial, Manuel Adorni.
«Entendemos que no hubo ninguna actitud que vaya en contra de (el código de) ética pública», dijo para luego añadir que el Gobierno no prevé despedir por el momento a ningún funcionario por el escándalo.
La Justicia argentina está investigando al presidente y otros dirigentes por los delitos de asociación ilícita, estafa e incumplimiento de los deberes de funcionario público, entre otros.