Excesos y confiscación tributaria municipal
Camilo London.- Vengo sosteniendo en diversos foros gremiales y profesionales, que estamos presenciando una inédita e insólita rebelión tributaria de los municipios contra la Constitución Nacional y la Ley Orgánica del Poder Público Municipal, la cual parece tener por objeto la confiscación del patrimonio y el aniquilamiento de las pocas empresas que todavía operan en Venezuela.
En este mismo espacio digital compartí previamente dos artículos, el primero de ellos “Para Muestra un Caroní” y el segundo “La Rebelión Tributaria de los Municipios”, publicados en octubre y diciembre pasado respectivamente. Alerté con ellos sobre la frenética imposición de reformas a Ordenanzas del Impuesto Sobre Actividades Económicas por parte de algunos municipios que incurren en excesos que estarían quebrantando principios Constitucionales vinculados a la tributación.
No se trata solo de un caso aislado. El desconocimiento de la Constitución y las Leyes que establecen la regulación a las actuaciones de los municipios, se replica ya en muchas localidades del país, siendo los casos más emblemáticos los de Caroní, Valencia y ahora más recientemente el de Maracaibo. Estos son quizás los más renombrados por ser aquellos donde la reacción de los gremios empresariales y profesionales ha tomado más notoriedad a nivel nacional. Pero no son los únicos, son apenas una muestra de lo que está ocurriendo a lo largo y ancho del territorio nacional.
Uno de los aspectos que caracteriza la arbitrariedad de las autoridades municipales es el atentado contra los principios de certeza y seguridad jurídica al imponer reformas de las ordenanzas de forma intempestiva, así como el incremento desproporcionado de alícuotas impositivas que tienden a confiscar el patrimonio de las entidades productivas, sin el estudio de impacto económico que se requiere para emprender estas modificaciones.
Otro punto en común es la omisión de la consulta pública del proyecto de Ordenanza, así como la modificación del período impositivo del impuesto sobre actividades económicas, violando lo expresamente dictado en la Ley Orgánica que regula la Potestad Tributaria de los municipios, entre otros desaciertos.
Así mismo, muchos municipios están huyendo de la Unidad de indexación establecida en el Código Orgánico Tributario, reconociendo implícitamente que el Gobierno Nacional la manipula y la ha desfigurado y apartado de su objeto, para lo cual han adoptado en algunos casos al “Petro”, o creado nuevas unidades de valor tributario, para ajustar mínimos de tributación, valores fijos, tasas, rangos y tarifas de las exacciones fiscales del municipio. Esto lo forjan desconociendo las bases jurídicas que delimitan la potestad tributaria de las entidades locales.
Ante los reclamos de las Cámaras de Comercio e Industrias que agremian a los empresarios, la respuesta ha sido en unos casos la total indiferencia de las autoridades, pero en otros como en el de Maracaibo, se ha develado la respuesta despótica del Gobierno regional y municipal.
En un Estado donde se tuviese pleno respecto por el Derecho y donde el equilibrio de los Poderes Públicos no se encontrase severamente comprometido, esta rebelión de los municipios contra la Constitución Nacional y contra los ciudadanos, ya habría encontrado oportuno reparo mediante la reacción oportuna de sus instituciones democráticas.
Hay que destacar que en Maracaibo, ante la estrafalaria reacción y desproporcionadas amenazas proferidas por las autoridades municipales y regionales, han sido numerosas las voces que desde diferentes ámbitos hemos expresado la solidaridad y respaldo a los representantes de la Cámara de Comercio de esa ciudad y al capítulo regional de FEDECAMARAS del Zulia, que de forma pertinente y en cumplimiento de su rol de representación de la sociedad civil organizada, han señalado lo impropio de las reformas tributarias en ese municipio.
Estoy convencido de que a los gremios empresariales y profesionales les mueve en este reclamo el profundo amor y compromiso por el país, con la certeza de que la razón y el Derecho les asisten como en tantas otras oportunidades. Seguro estoy también, que desde esos mismos gremios se seguirá asumiendo una postura crítica y haciendo los aportes que corresponda para la reconstrucción de la institucionalidad democrática en el país. Desde este modesto espacio, para ellos mi mayor solidaridad.
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Licenciado en Administración Comercial egresado de la Universidad de Carabobo, con especialización en finanzas y gestión de tributos, consultor empresarial, conferencista y editor del Blog GERENCIA Y TRIBUTOS (gerenciaytributos.blogspot.com)