Un informe publicado el martes 2 de julio por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), indica que las economías emergentes continuarán impulsando el mercado agrícola en la próxima década, pero con cambios regionales y una nueva afluencia económica.
«Un cambio notable que se espera para el próximo decenio es el papel cada vez mayor de la India, el sudeste asiático y el África subsahariana y la disminución del papel de China», revela el informe denominado «Perspectivas agrícolas 2024-2023 de la OCDE y la FAO».
Si bien China representó el 28% del crecimiento del consumo mundial de productos agrícolas y pesqueros en el decenio anterior, se proyecta que su participación en la demanda adicional durante el próximo decenio caerá al 11%, atribuido no sólo a una disminución de la población y un crecimiento más lento de los ingresos, sino también a una estabilización de los patrones de nutrición.
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Según estimaciones, la India y los países del sudeste asiático representarán el 31% del crecimiento del consumo mundial en 2033, impulsados por el crecimiento de su población urbana y su creciente riqueza.
Entre las regiones predominantemente de bajos ingresos, se estima que el África subsahariana contribuirá con una parte considerable del consumo mundial adicional (18%), debido principalmente a la demanda de alimentos impulsada por el crecimiento demográfico, se lee en una nota publicada por la OCDE.
Se prevé que el consumo total de productos agrícolas y pesqueros (como alimentos, combustibles y otras materias primas industriales) aumente un 1,1% anual durante el próximo decenio, y que casi todo ese consumo adicional se produzca en países de ingresos bajos y medios.
También se proyecta que la ingesta calórica de los alimentos aumente un 7% en los países de ingresos medios, debido, en gran medida, al mayor consumo de alimentos básicos, productos pecuarios y grasas. La ingesta calórica en los países de ingresos bajos aumentará un 4%, «demasiado lento para alcanzar la meta del Objetivo de Desarrollo Sostenible de acabar con el hambre en 2030».
Mathias Cormann, secretario general de la OCDE, expresó que estas estimaciones son una «valiosa referencia» para la planificación de políticas, «proporcionando una sólida base de evidencia y datos para las proyecciones a mediano plazo de los mercados de productos básicos agrícolas».
«Se espera que en la próxima década los volúmenes de productos básicos agrícolas comercializados a nivel mundial aumenten entre las regiones exportadoras netas y las regiones importadoras netas, pero con cambios regionales que reflejen un mayor consumo mundial en la India y los países del sudeste asiático».
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