Mathias Cormann, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), dijo que estiman un crecimiento global estable para 2024 y 2025, aunque prevén que se mantenga por debajo de su promedio de largo plazo.
Las perspectivas económicas proyectan un crecimiento constante del PIB mundial del 3,1% en 2024, tal como en 2023, y de 3,2% en 2025, según una nota de prensa publicada en el portal web de la OCDE.
También puede leer: Iniciativa de la OCDE y el PNUD aumenta recaudación tributaria en países en desarrollo
El impacto de las estrictas condiciones monetarias sigue sintiéndose, particularmente en los mercados inmobiliario y crediticio, pero la actividad mundial está demostrando ser relativamente resistente, la inflación continúa disminuyendo y la confianza del sector privado está mejorando.
La tasa de desempleo de la OCDE se situó en el 4,9% en febrero, cerca de sus niveles más bajos desde 2001. Los ingresos reales están aumentando en muchos países de la OCDE a medida que la inflación se modera y el crecimiento del comercio se ha vuelto positivo. Las perspectivas siguen difiriendo entre países: resultados más débiles en muchas economías avanzadas, especialmente en Europa, y un fuerte crecimiento en Estados Unidos y muchas economías de mercados emergentes.
“Las medidas políticas deben garantizar la estabilidad macroeconómica y mejorar las perspectivas de crecimiento a mediano plazo», expresó Cormann.
Agregó que la política monetaria debe seguir siendo prudente, con margen para reducir las tasas de interés oficiales a medida que la inflación disminuye.
Sobre la política fiscal refirió que debe abordar las crecientes presiones sobre la sostenibilidad de la deuda, «las reformas políticas deben impulsar la innovación, la inversión y las oportunidades en el mercado laboral, especialmente para las mujeres, los jóvenes y trabajadores mayores».
Inflación y PIB
Se proyecta que la inflación general en la OCDE disminuirá gradualmente del 6,9% en 2023 al 5,0% en 2024 y al 3,4% en 2025.
Otra de las proyecciones es que el crecimiento del PIB en Estados Unidos será del 2,6% en 2024, antes de desacelerarse al 1,8% en 2025, a medida que la economía se adapte a los altos costos de endeudamiento y a la moderación de la demanda interna.
En la zona del euro, que se estancó en el cuarto trimestre de 2023, una recuperación de los ingresos reales de los hogares, la rigidez de los mercados laborales y las reducciones de las tasas de interés oficiales ayudarán a generar un repunte gradual. Se prevé que el crecimiento del PIB de la zona del euro sea del 0,7% en 2024 y del 1,5% en 2025.
Lea la nota completa aquí.