La política de flexibilización de sanciones que adoptó el gobierno de los Estados Unidos para el sector de los hidrocarburos de Venezuela a partir de noviembre de 2022 ha permitido un repunte importante en la producción de crudo y en las exportaciones.
La primera resolución adoptada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC) fue el otorgamiento de la Licencia General 41 a favor de la empresa Chevron, que a partir de enero de 2023 logró que reactivaran los suministros de crudo hacia los Estados Unidos tras cuatro años prohibidos; y al mismo tiempo autorizó a la transnacional invertir con el fin de recuperar la capacidad de producción de las cuatro empresas mixtas en las que tiene participación, reseñó Petroguía.
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Las cifras de Pdvsa indican que el volumen de extracción de crudo en 22 meses arroja una variación de 229 mil barriles, un alza de 33% en términos relativos para alcanzar los 922 mil barriles diarios al cierre de agosto, y de ese volumen casi que la cuarta parte corresponde justamente a las asociaciones en las que participa Chevron.
Cifras de otras organizaciones internacionales que monitorean al sector de hidrocarburos mundial indica valores inferiores, pero con igual tendencia al alza. Por ejemplo, el informe de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) señala que las llamadas fuentes secundarias indican que la producción venezolana hasta agosto era de 851 mil barriles por día, volumen que está 28% con respecto al nivel que tenía hace 22 meses.
La producción petrolera venezolana debido al efecto de las sanciones y la pandemia del COVID-19 cayó a un mínimo de 393 mil barriles diarios a mediados de 2020 y a partir de ese momento comenzó a repuntar por encima de los 600 mil barriles un años después y sobre los 700 mil barriles en octubre de 2021 pero la falta de inversión ocasionó un estancamiento que se mantuvo hasta que la OFAC comenzó a otorgar los permisos a las empresas.
La flexibilización también puede verse en los números de exportaciones. Los reportes de comercio de Pdvsa señalan que la cifra más reciente al cierre del segundo cuatrimestre de 2024 arrojó despachos por el orden de 767 mil barriles diario, un alza de 23% con respecto a noviembre de 2022; y si la lupa se pone en los envíos hacia el mercado norteamericano, la cifra hasta agosto estuvo sobre los 230 mil barriles diarios, lo que indica que casi se sextuplicó con respecto a enero de 2023 cuando se iniciaron los despachos con un promedio de 40 mil barriles diarios.
Las licencias de la OFAC, que además de Chevron incluyen las autorizaciones otorgadas a las empresas europeas Repsol de España y Maurel & Prom de Francia además de Reliance de India, han permitido que Venezuela –aún sin tener una producción por encima de 2 millones de barriles diarios- ocupe el quinto lugar como suplidor de crudo del mercado energético norteamericano y nuevamente figure entre los productores con despachos hacia Europa.
