La escasez de lluvias empujó al Canal de Panamá a reducir a 32 el número de embarcaciones que desde este domingo atraviesan a diario la vía interoceánica, una medida que además de disminuir los ingresos del canal, claves para las arcas públicas, hará que aumente previsiblemente el atasco marítimo.
La medida entró en vigor pasada la medianoche, cuando como de costumbre eran visibles en la bahía de Panamá, en el océano Pacífico, medio centenar de embarcaciones en fila a la espera de su turno para atravesar el Canal, iluminando el horizonte como una urbe costera.
«Es importante señalar que una reducción en el número de tránsitos diarios durante un período prolongado, aumentará el tiempo de espera para algunos buques, en particular aquellos que no obtienen una reserva», advirtió la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) en el aviso emitido esta semana sobre la nueva restricción.
En condiciones normales, el promedio diario de tránsito es de entre 35 y 36 buques, según explicó el mes pasado el administrador del Canal, Ricaurte Vásquez, por lo que la nueva medida que entra en vigor hoy se traduce en una reducción de entre 3 y 4 naves al día.
«Hay agua, pero no donde guardarla», comenta a EFE un trabajador del Canal en las originales esclusas de Miraflores, que operan desde la inauguración en 1914 de la vía construida por Estados Unidos.
Esta mañana, una de las embarcaciones que atravesó las esclusas fue un buque granelero con bandera panameña, que en alrededor de una hora, tras pagar unos 150.000 dólares, avanzó guiado por remolcadores mientras se producía, con la apertura y cierre de las grandes compuertas, el llenado y vaciado de agua.
Ascendió por tramos de diferente altura hasta 27 metros sobre el nivel del mar, para luego navegar entre ocho y diez horas hasta llegar al Caribe.
El Canal de Panamá conecta 180 rutas marítimas que llegan a 1.920 puertos en 170 países, y por él pasa alrededor del 3% de comercio mundial. En el año fiscal 2022, el Canal entregó al Gobierno panameño el histórico importe anual de 2.494,4 millones de dólares.
En la notificación advirtiendo de las restricciones «hasta nuevo aviso», la ACP especificó que cada jornada 22 de los buques atravesarán las esclusas Panamax de Miraflores, y 10 lo harán por las Neopanamax, de mayor tamaño e inauguradas en 2016 tras la ampliación del Canal.
Falta de lluvias
El sistema climático de Panamá se rige por una temporada lluviosa y otra seca. La primera comienza en mayo cuando el ciclo es normal y dura aproximadamente hasta noviembre, y la segunda va de diciembre a abril, exceptuando la vertiente del Caribe, donde llueve casi todo el año.
La Autoridad del Canal de Panamá explicó que fue necesario tomar las nuevas medidas «a pesar de la llegada de la temporada de lluvias al istmo de Panamá y de las continuas medidas de ahorro de agua que la ACP ha implementado en los últimos meses para mitigar los efectos adversos de la prolongada temporada seca en la cuenca del Canal».
Para el tránsito de más de 14.000 buques al año, el Canal se alimenta de los lagos artificiales Gatún (1913) y Alhajuela (1935), que además suministran el agua a la capital panameña, el área metropolitana y zonas circundantes, es decir, a cerca de la mitad de la población de este país de 4,2 millones de habitantes.
Pero resultan insuficientes, y se hace necesario la búsqueda de nuevas fuentes de almacenamiento en un país, Panamá, que es el quinto del mundo con mayor número de precipitaciones, el primero de Centroamérica. Tampoco escapa al efecto de la crisis climática.
El gerente de la División de Agua del Canal de Panamá, Erick Córdoba, explicó, según recoge la publicación interna del Canal El Faro, que se está experimentando una «temporada seca extensa», ya que han sido cinco meses y medio en los que no se registraron lluvias significativas en la cuenca de la vía, dos semanas menos que la temporada más extensa de la que se tiene registro.
Así, anotó Córdoba, «nos enfrentaríamos a un 2024 muy difícil si no se logra recuperar el nivel de los lagos, luego de todo el líquido que ha sido necesario utilizar durante los últimos meses» con lluvias «casi nulas».
EFE