La nueva generación de emprendedores venezolanos está buscando espacios para desarrollar sus negocios. Si bien es cierto que adquirir un comercio exige grandes sumas de dinero, también en verdad que alquilar esos espacios comerciales es una buena opción.
El presidente del Fondo de Valores Inmobiliarios (FVI), Horacio Velutini, señaló en una entrevista exclusiva a Finanzas Digital que la actividad comercial se vio muy afectada por las restricciones en la movilidad e interacción social que trajo la pandemia a partir de marzo 2020, «lo que nos obligó a realizar una profunda reestructuración interna para hacer la empresa más ligera y más ágil».
Asimismo, indicó que para finales 2020 y principios 2021, «la actividad empezó a tomar algo de movimiento, y pensamos que en el último trimestre de 2021 regresaremos a la actividad comercial que vivimos a finales de 2019″.
«En los últimos años se ha hablado de la caída, el ‘down side’, de forma ininterrumpidamente y muy poco de la opción de valor o potencial de crecimiento que tiene Venezuela. Creo que Venezuela ofrece la posibilidad de retornos asimétricos para el inversionista, por lo que, la crisis ofrece una oportunidad singular para el capital de riesgo y sobre todo para los venezolanos que conocen su plaza», destacó.
Precisó que el consumo privado «ha empezado a crecer de forma atenuada, el sector comercial y de servicios se va a beneficiar de esta circunstancia que creo, va a ser una tendencia para los próximos años».
Comentó que el negocio inmobiliario «está en su punto más bajo histórico, cifras vistas en la crisis bancaria de principios de los 90. Veo mucho potencial de crecimiento en comercio y vivienda, de forma gradual y tímida aún, no veo los precios más bajos que los actuales, pienso que estamos en un piso, ahora la discusión es qué tan rápido pueden crecer y eso requiere un análisis individual por las diferentes categorías, es decir, oficina, comercio, vivienda, galpones, etc».
«Creo que estamos en la puerta de un cambio de paradigma económico y de continuar esta tendencia, y aprobarse leyes que den más seguridad a la inversión privada, veremos una recuperación en todos los sectores», resaltó.
Recuperación rápida
Velutini manifestó que la media o promedio de desocupación «es difícil calcular» y depende mucho del estado físico de las instalaciones y su ubicación. «En nuestro caso promedio bajamos de 95% de ocupación a 88% en el 2020, pero hemos observado una recuperación rápida y hay mucho interés de nuevos conceptos e ideas de jóvenes venezolanos en nuestros espacios que están desplazando los formatos anteriores», sumó.
«Vivimos un cambio generacional, los jóvenes entre 20 y 35 años traen una dinámica nueva, los venezolanos son muy cosmopolitas y aspiracionales, muchos que están fuera ven con interés de poder replicar lo que han visto en España, Norte América, Chile, Turquía, etc., saben que el mercado venezolano es muy dinámico y rentable y se conectan con los venezolanos que están aquí. Es muy interesante esa interacción que ocurre en todas las áreas económicas», explicó.
Cree que se habla poco del cambio generacional y su efecto: »debemos tratar de entenderlo ya que va a tener repercusiones muy importantes en lo económico, social y político. Esta generación ve los años 80 y 90 como historia antigua, entiende mejor su entorno hoy que la generación pasada y saben que le llegó su tiempo. Son los que en el presente construyen del futuro de Venezuela».
«Mi generación le toca ayudarlos y entenderlos o en caso contrario, montarse en la acera y dejarlos pasar. Yo estoy con los que cree que hay que entenderlos, ayudarlos y trabajar junto con ellos. Hay que hablar del presente, pasar la página del pasado y la nostalgia que trae», añadió.
Demanda de compra es baja
El presidente del FVI puntualizó a Finanzas Digital que el valor por metro cuadrado dependerá de si es para oficina, comercio o vivienda; dónde está ubicado, la calidad de la instalación y si está remodelado. «Un ejemplo es el Centro San Ignacio, que en 2012 se vendió un metro cuadrado en US$ 10.000 y ahora debe rondar cerca de US$ 2.000 por metro cuadrado. Pienso que los veremos a US$ 2.500 por metro cuadrado en dos o tres años».
Precisó que la cultura del comerciante dueño de su local de los años 80 y 90 «ya no está presente, quien quiere montar un negocio comercial quiere alquilar, por eso la demanda de compra es baja pero la de alquiler crece. Nuestro negocio es comprar y alquilar, esta nueva cultura beneficia a nuestro negocio en el FVI».
Dijo que una propiedad ‘Premium” actualmente en Caracas se puede alquilar en 15 dólares por metro cuadrado, mientras que una similar en Santiago o Bogotá «puede rondar US$ 80 por metro cuadrado o más. En la medida que la economía comience a crecer y el consumo se recupere, creo que en Caracas veremos a US$ 40 el metro cuadrado en los años 2024-2025».
Destacó que «el ‘market cap’ del FVI en los últimos 3 años ha rondado entre 80 a 150 millones de dólares, el aumento de capital que realizamos, el inversionista entró a una valoración de 109 millones de dólares por lo que luce interesante el ‘up side’».
«Pero los últimos años ha sido terrible económicamente para Venezuela y parece que esto puede empezar a revertirse por lo que, la valoración del mercado de la compañía puede crecer ya que, como hemos explicado, el valor del activo inmobiliario tiende a crecer y el flujo de caja esperado por alquileres también. Estamos en uno de los sectores que más puede crecer en los próximos 10 años. Nuestra apuesta en el ‘option value’ que ofrece Venezuela. Nuestro presente y nuestro futuro están aquí», finalizó.