Regulador petrolero de México abandonó planes para multar a Pemex por varias infracciones

Pemex
Foto: Getty Images

El regulador petrolero de México archivó los planes para imponer al menos tres multas a la estatal Pemex por infracciones en los campos nuevos más prometedores del país, según dos docenas de documentos no informados anteriormente y confirmación de tres fuentes.

Es la señal más reciente de un regulador debilitado que, luego de cambios en el liderazgo respaldados por el Gobierno, permite que Pemex opere con menos restricciones para ayudar a alcanzar las ambiciosas metas de producción del presidente, según muestran informes de Reuters.

Los documentos legales y administrativos, todos fechados entre junio y agosto del año pasado, contenían observaciones y pruebas fotográficas de visitas de campo no anunciadas realizadas por funcionarios que descubrieron varias violaciones.

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Los borradores de notificaciones de multas, que no fueron firmados ni enviados, y la correspondencia relacionada enviada a Pemex detallan las violaciones y las consecuencias legales.

Los documentos que revisó Reuters no contienen razones por las cuáles las multas no avanzaron más, pero las tres fuentes dijeron que se detuvieron en el período previo y posterior a los cambios de liderazgo en el regulador el año pasado.

El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador reemplazó al titular y a un alto funcionario de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), que había desafiado a la estatal, con exfuncionarios de Pemex entre agosto y noviembre.

Dado los cambios de liderazgo, las tres fuentes dijeron que funcionarios de alto rango les habían dicho en dos ocasiones distintas, cuando discutían los borradores, que ya no deberían multar a Pemex.

Otras dos fuentes del regulador agregaron que también recibieron instrucciones verbales de los mismos altos funcionarios para «apoyar» a la estatal en el logro de las metas de producción establecidas por el Gobierno.

Reuters no pudo encontrar documentación sobre ningún cambio oficial en la política de multas por parte del regulador, cuyas responsabilidades legales incluyen evaluar y responsabilizar a Pemex. De acuerdo con las leyes de transparencia de México, las comunicaciones escritas pueden ser solicitadas y obtenidas por periodistas y otros grupos.

Pemex, el mayor contribuyente del país a las arcas del Estado, es también la petrolera más endeudada del mundo. El presidente López Obrador prometió desde su campaña electoral que haría que el país fuera autosuficiente en energía.

Las dos docenas de documentos del regulador y Pemex mostraron que los funcionarios comenzaron el verano pasado a preparar un caso para tres multas en los nuevos campos más prometedores del país: Ixachi en Veracruz y Quesqui y Tupilco en Tabasco.

En los tres campos, el regulador había planeado multar a Pemex por perforar pozos sin los permisos correctos; en Ixachi y Quesqui, también encontró otras violaciones, incluidas algunas que llevaron a que se quemaran cantidades excesivas de gas natural.

Una imagen, añadida como prueba de apoyo a la multa de Ixachi, mostraba una enorme columna de humo negro saliendo de una antorcha a cielo abierto donde se estaba destruyendo deliberadamente gas y otros productos de hidrocarburos debido a la falta de infraestructura.

Todos los procesos para emitir multas estaban avanzados el verano pasado, según muestran los documentos, y solo se determinarán los montos finales y las fechas para su emisión. Tres de las fuentes del regulador lo confirmaron.

Funcionarios de alto rango del regulador ya habían discutido la multa propuesta para Ixachi en una reunión el 21 de julio, según los documentos, y la de Quesqui el 9 de agosto.

Las mismas tres fuentes dijeron que los funcionarios de Pemex y el nuevo liderazgo del regulador habían argumentado que la empresa estatal no debería ser multada por infracciones porque las actividades de petróleo y gas son estratégicas y una prioridad para el país.

En un documento de Pemex fechado el 31 de agosto del año pasado y visto por Reuters, un funcionario de Pemex pidió al regulador una «anuencia emergente» para perforar un pozo en Ixachi sin permiso argumentando que estaba «justificado técnica y económicamente el beneficio para el Estado Mexicano».

El documento fue firmado por Rafael Guerrero, entonces representante legal de Pemex ante el regulador, quien fue designado jefe de la división técnica del regulador en los cambios del año pasado. 

En Pemex y el Gobierno, también se notó el alejamiento de las multas: dos fuentes que trabajan en exploración y producción de la empresa, y una en la Secretaría de Energía, dijeron a Reuters que los funcionarios ahora simplemente estaban emitiendo «recomendaciones» de cambio al abordar los incumplimientos de las regulaciones que podría haber recibido multas en el pasado.

Funcionarios del regulador visitaron Quesqui nuevamente sin previo aviso a mediados de abril de este año y observaron que grandes cantidades de gas y otros productos de hidrocarburos se quemaron luego de una supuesta falla eléctrica en la planta, dijeron las fuentes.

Su visita no estuvo relacionada con la multa por infracciones en el mismo campo el verano pasado que no avanzó. Las fuentes dijeron que hasta ahora no se ha iniciado ninguna multa adicional.

Antes de que el Gobierno reemplazara la dirección del regulador, Pemex había sido multada al menos tres veces por infracciones en Ixachi y Quesqui, informó Reuters el año pasado. Las multas o la información de las visitas no se hacen públicas.

Hasta que cambió el liderazgo, el regulador era ampliamente considerado como la última agencia independiente que intentaba mantener controles y equilibrios sobre Pemex. La Comisión Reguladora de Energía (CRE) y el regulador ambiental del sector de petróleo y gas ya habían sido dotados de funcionarios leales a López Obrador.

Susana Cazorla, una consultora energética que ocupó varios altos cargos en la Comisión Reguladora de Energía y la Secretaría de Energía, dijo que estaba cada vez más preocupada por lo que esto significa para los temas ambientales, sociales y de gobierno corporativo.

«El riesgo más importante es que Pemex, que está desesperada por aumentar la producción, ya no respete las reglas existentes», dijo. «Y que los reguladores se vuelvan demasiado débiles para exigir y hacer cumplir».

Incluso cuando impuso multas en el pasado, el regulador tuvo dificultades para convencer a Pemex de apegarse a las reglas en ciertos casos: Reuters informó en noviembre que altos funcionarios de Pemex consideraban que algunas violaciones estaban justificadas porque ayudaban a aumentar la producción y estaban dispuestos a pagar multas.

Reuters