Más presión para Washington, algo de alivio para Caracas

Alex VallenillaAlex Vallenilla.- El oro y el petróleo tuvieron un fuerte repunte al final de la semana pasada. Algunos inversores buscaron refugio. Otros especuladores se posicionaron en petróleo. El motivo fue la crisis que acaba de estallar en el Medio Oriente entre Hamás e Israel. Lo que aparentemente es un cisne negro en medio de la crisis global que existe.

Un nuevo frente de guerra le pone nueva presión a Washington. Que ya tiene suficiente con el alto precio del petróleo y las altas tasas de interés.

El ataque de Hamás a Israel tiene una traducción en el plano económico. Y es ahora otro ingrediente que se suma a la serie de eventos que ha obligado a Washington construir puentes de plata con Caracas. Veamos.

Irán se beneficia

Israel está reaccionando duramente contra Palestina en la Franja de Gaza. Esto ya produjo un efecto nada deseado para los norteamericanos. Arabia Saudita acaba de cancelar sus negociaciones de paz con Israel. Lo que pospone el corredor comercial que se podía haber creado y tenía el fin de debilitar la posición de Irán. Al mismo tiempo, Egipto, Jordania, Líbano y Siria, están involucrándose en el conflicto. Es decir, la región se está desestabilizando, favoreciendo a Irán, que es beneficiario indirecto de que sus rivales fracasen en la paz con Israel.

Todo el petróleo que sale del Golfo Pérsico, transita por el Estrecho de Ormuz. Se trata de la quinta parte del petróleo que se comercia en el mundo. Este accidente geográfico funciona bajo la vigilancia y el control de Irán. Los iraníes apoyan a Palestina y una mayor presión de Israel, podría hacer que Irán entre en el conflicto de manera directa y además, atente al tránsito de tanqueros petroleros. Por eso el petróleo se ha disparado nuevamente tras esta crisis.

La presión del petróleo

Rusia se beneficia del aumento del barril de petróleo, lo que le ayuda a financiar su incursión en Ucrania. Así que este estallido podría ser malas noticias para Ucrania, porque Washington tiene otro foco, y este en el Medio Oriente, sí que es serio.

EEUU viene aumentando las tasas de interés para luchar contra la inflación. Esto supone la caída del precio de los activos de riesgo, que incluye el petróleo. Para la Casa Blanca, si el petróleo cae debajo de $60, Moscú es derrotado. Pero la OPEP+, que ahora está enfrentada a Washington, comenzó a aplicar recortes de producción. Por lo que el precio del petróleo rebotó y de nuevo escala hacia los 90 dólares.

Los inventarios petroleros en EEUU están en mínimos. A esto se suma, una caída de casi 50 % de las plataformas de perforación activas en el último año. Mientras las reservas estratégicas petroleras (SPR) siguen cayendo.

Los puentes entre Washington y Caracas

Si Israel avanza y los árabes se suman a un conflicto más grande, el precio del petróleo sube más. Si EEUU, aplica sanciones totales a Irán, el precio del petróleo sube más.

Toda esa situación obligan a Washington a buscar alivio en Caracas. Aunque esta es aliada de China y Rusia. Urge a la Casa Blanca acelerar en el tema venezolano. Necesitan petróleo, más cuando se acerca el año electoral.

Hasta ahora, uno de los pasos ya lo lograron, separar el control de Citgo de Pdvsa. La Casa Blanca quiere asegurarse que si Nicolás Maduro vuelve a ser presidente, al menos no tendrá el control de Citgo. Así evita que la relación de Venezuela con Rusia, signifique la entrada de rusos a EEUU, por esa vía. Washington necesita reactivar producción en Venezuela y ahora es más urgente. Para aumentar sus reservas, sin que se afecten los precios, se necesita que fluya más petróleo. Para eso requiere retirar las sanciones petroleras, pero debe haber un gobierno legitimado y reconocido, de modo que en Occidente haya un mensaje de restauración de la democracia. Quiere decir que la crisis actual, en el Medio Oriente, si se sale de control, presionará a la Casa Blanca, a resolver más rápido con Miraflores. Actualmente, siguen las negociaciones en Qatar. En Caracas saben de las circunstancias globales, por lo que no disimulan sentirse un poco cómodos.

El tiempo se agota

El alza de tasas de interés ha debido meter a EEUU en una recesión. No ha ocurrido todavía porque los norteamericanos han resistido la caída de la liquidez recurriendo a sus ahorros. También recurrieron a las tarjetas de crédito, pero esto último se está desacelerando, debido a los altos intereses. Sin embargo, la realidad del ahorro en EEUU está cambiando y apenas logran ahorrar 3,9 % de sus ingresos, cuando solían reservar 15 %, para jubilaciones o fondos de emergencia, según el PIDSDPS Index.

Durante la semana pasada, algunos voceros de la Reserva Federal, anunciaron que para el 1 de noviembre no habrá nuevo aumento de la tasa de interés. A pesar de que no alcanzan la meta de inflación de 2 % y el petróleo sigue aumentando. Eso significa que la FED está ya en sus límites. Que la estrategia de Washington con la revalorización del dólar se podría estar agotando.

 

@alexvallenilla

 

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