TotalEnergies consiguió un beneficio de 16.321 millones de dólares entre enero y septiembre, un 5% menos que en el mismo periodo de 2022, que se explica por la notable caída de los precios de los hidrocarburos desde los techos que habían alcanzado con el comienzo de la invasión rusa de Ucrania.
Ese impacto de reducción de precios es todavía más evidente en el resultado operativo neto ajustado, que retrocedió un 36% hasta 19.383 millones de dólares, precisó el gigante petrolero francés este miércoles en un comunicado.
Hay que tener en cuenta que el precio del petróleo Brent en esos nueve primeros meses del año cayó un 22% respecto a ese mismo periodo del año anterior (y aun así se quedó en 82,1 dólares de media el barril), y en el caso del gas el bajón fue superior al 60 % en las principales plataformas de comercio mundial.
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Además, los márgenes de los costos variables en la actividad de refino en Europa disminuyó un 33%.
El resultado operativo neto ajustado se redujo en particular en el negocio de exploración y producción (-42% a 8.140 millones de dólares), en el gas natural licuado (-46% a 4.744 millones) y en refinación y la química (-31% a 4.021 millones).
La otra cara de la moneda fue la electricidad, donde el resultado se multiplicó por 2,7, aunque en términos absolutos su aportación fue todavía relativamente modesta, de 1.326 millones de dólares.
La empresa destacó, en cualquier caso, que pese a esa rebaja de los beneficios, su rentabilidad de capitales propios alcanzó el 20,1% entre el 1 de octubre de 2022 y el 30 de septiembre de este año.
Si se toma de forma aislada el tercer trimestre, el beneficio neto creció un 1% hasta 6.676 millones de dólares, mientras el resultado operativo neto ajustado cayó un 34% a 6.808 millones de dólares.
En esos tres meses si los precios de los hidrocarburos y de los márgenes de refino disminuyeron con fuerza, la producción de TotalEnergies subió un 5% al equivalente de 2,476 millones de barriles, si se excluye la actividad de la compañía rusa Novatek, en la que ha dejado congelada su participación por la guerra en Ucrania.
Para el consejero delegado, Patrick Pouyanné, las cifras de este trimestre demuestran una vez más «la pertinencia de la estrategia de transición rentable», en particular por el peso que va cobrando el negocio de electricidad, que aportó más de 500 millones de dólares.
A la vista de esas cuentas, el consejo de administración ha decidido hacer un tercer pago de forma anticipada a cuenta del dividendo de 2023 de 0,74 euros por acción, lo que supone un aumento del 7,25% respecto a 2022.
De esa forma, la tasa de distribución a finales de septiembre será de casi el 43%, en línea con el nuevo objetivo que es de más del 40%.
EFE
