Turbulencia en el mercado financiero internacional
José Grasso Vecchio.- Tras la caída del Silicón Valley Bank (SVB) y el Signature Bank y su posterior rescate por parte de las entidades competentes del gobierno de Estados Unidos, que tuvieron una actuación rápida y oportuna para evitar la propagación del temor entre los depositantes. Luego, el segundo banco más importante de Suiza, el Credit Suisse, tuvo que ser adquirido por UBS, el mayor banco de ese país, con una significativa presencia internacional, en una operación donde participó el gobierno suizo, al tiempo que el Banco Central Europeo procuró calmar al mercado, diciendo que estaba listo para inyectar liquidez, de ser necesario.
Sin embargo, la noticia de algunos problemas con el banco de mayor tamaño en Alemania volvió a encender las alarmas. Efectivamente, días atrás el Deutsche Bank sufrió una caída muy importante en las bolsas europeas, especialmente en la de Frankfurt, donde sus acciones se desplomaron, lo cual afectó a todo el sistema bancario de Europa lo que se tradujo en el hecho que en tres semanas de marzo perdiera el 21% de los que había ganada en enero y febrero.
El Deutsche Bank ha sido afectado por cuanto su base de negocios en una buena proporción ha venido mutando desde el préstamo a las empresas y hogares hacia los derivados financieros, lo que implicó asumir un riesgo excesivo. Ello ha llevado a que la valoración de mercado de esa entidad financiera esté por debajo respecto a bancos similares en Europa. A favor del Deutsche Bank juega el hecho de que durante los últimos años su base de depósitos ha sido sólida manteniendo a febrero unos 600.000 millones de euros.
Un fenómeno relativamente nuevo en esta situación financiera es el trasvase de dinero por cifras astronómicas principalmente a fondos del mercado monetario por el orden de US$ 286.000 millones, cuyos principales beneficiarios han sido Goldman Sachs, JP Morgan Chase, Fidelity Investment, entre otros. Se trata de la típica corrida hacia inversiones de muy bajo riesgo, donde se privilegia la seguridad a la rentabilidad.
En medio de esta situación, el sábado 25 de marzo durante una conferencia en Beijing, la presidenta del FMI, Kristalina Giorgieva, advirtió de la eventualidad de mayor inestabilidad en los mercados financieros, en parte por las alzas de las tasas de interés que están aplicando los bancos centrales para combatir la inflación. De hecho, el lunes 20 de marzo el Banco de Inglaterra volvió a subir la tasa de interés a lo que siguió al día siguiente la Reserva Federal con su novena alza seguida de la tasa de política monetaria desde marzo pasado. La Reserva Federal con la subida de tasas trajo buenas noticias a los ahorristas que buscan mejores rendimientos para su dinero, sin embargo tiene también un impacto en la cartera de inversiones de los bancos. Evidentemente que ello disminuye el valor de las inversiones de los bancos en títulos de los gobiernos, donde se concentra una parte importante de sus inversiones.
En medio de toda esta situación, el First Citezens Bank (el número 34 en tamaño en Estados Unidos), adquirió más de US$ 72.000 millones en activos del Silicón Valley Bank con un descuento importante y la Corporación Federal de Protección de los Depósitos anunció que va a vender activos del Silicón Valley Bank. Esto pone de manifiesto que hay una acción coordinada entre las entidades del gobierno americano y los bancos para reforzar la confianza en el sistema.
En este contexto, algunos miembros del Directorio de la Reserva Federal ya comenzaron a advertir del peligro de una recesión en Estados Unidos, debido a estos episodios tan nocivos cuando se mina la credibilidad en la banca. Un evento de ese tipo podría afectar a toda América Latina al disminuir sus exportaciones a Estados Unidos y también a una economía europea muy debilitada. Por lo pronto las probabilidades de que Estados Unidos entre en recesión se ha incrementado de manera significativa. Debemos estar muy atentos a este tema para ver su evolución.
Falta ahora por analizar, las lecciones que se aprendan de estos episodios y cómo llevarlos a regulaciones y actividad de supervisión, que eviten que se repitan hechos similares. Si bien por ejemplo en el caso del SVB hubo advertencias de parte de las autoridades sobre insuficiencia de los sistemas de gestión de riesgos ¿por qué no se tomaron acciones? o de haberse tomado, ¿por qué no fueron suficientes?
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Abogado Universidad Católica Andrés Bello. Master en Derecho Comparado Southern Methodist University Dallas Texas; Advanced Management for Bankers Wharton School en Philadelphia. Inició su carrera bancaria en 1976, con más de 40 años de experiencia bancaria. Ha ocupado diversos cargos gerenciales y de dirección en importantes instituciones. Fundador y presidente ejecutivo de la Asociación Venezolana para el Síndrome de Down. Dictó clases de pregrado y postgrado en áreas de finanzas y banca en las principales Universidades del país.