El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, lanzarán este miércoles una iniciativa para avanzar en los derechos de los trabajadores, uno de los principales puntos de atención de ambos líderes, dijeron funcionarios estadounidenses de alto rango.
La Alianza Estados Unidos-Brasil para los Derechos de los Trabajadores será bilateral al principio, pero se animará a otros países y organizaciones a unirse, dijeron funcionarios de alto rango del Gobierno de Biden, sin nombrar a otros posibles participantes.
Biden y Lula harán un anuncio cuando mantengan su segunda reunión en persona el miércoles, durante su estancia en Nueva York para asistir a la Asamblea General anual de las Naciones Unidas.
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Cuando Lula visitó a Biden en la Casa Blanca en febrero, ambos líderes se centraron en gran medida en la crisis climática y se comprometieron a acelerar las medidas para proteger la Amazonia, así como en la necesidad de luchar y avanzar en los valores democráticos.
«Esta asociación en favor de los derechos de los trabajadores es otra área en la que existe una clara afinidad y complementariedad entre Estados Unidos y Brasil, pero también entre nuestros dos presidentes», dijo uno de los funcionarios, añadiendo que tanto Biden como Lula compartían «una visión común de crecimiento económico equitativo e integrador».
Entre los principales temas que se abordarán figuran el trabajo infantil, el impacto en los trabajadores de las transiciones hacia una economía digital y de energías limpias, la economía colaborativa y la discriminación en el lugar de trabajo contra las mujeres, las personas LGBTQ+ y las minorías raciales y étnicas, dijo un segundo funcionario.
Ambos líderes planean plantear los temas en foros multilaterales como el Grupo de las 20 principales economías, que Brasil encabezará el próximo año, y los eventos climáticos mundiales COP 28 y COP 30, dijo el Gobierno brasileño en un comunicado.
La iniciativa pretende «involucrar a socios del sector privado en enfoques innovadores para crear empleos decentes en cadenas de producción clave, combatir la discriminación en el lugar de trabajo y promover la diversidad», señala el comunicado.
El anuncio coincide con una huelga de 12.700 miembros de United Auto Workers contra Ford, General Motors y Stellantis, la matriz de Chrysler, para presionar por sus demandas de mejores salarios y beneficios.
Se trata de un intento de Estados Unidos de estrechar lazos con Brasil, que ha tratado de mantener vínculos estrechos con China, su principal socio comercial, incluso cuando las tensiones han aumentado bruscamente entre Pekín y Washington.
Uno de los funcionarios dijo que las autoridades estadounidenses habían sido muy claras acerca de las preocupaciones de Washington sobre las violaciones de los derechos humanos en China, sus prácticas económicas y su expansión militar, y que entablarían conversaciones sobre esos temas con Brasil.
También se espera que los dos líderes discutan la creciente crisis humanitaria en Haití y la oferta de Kenia de liderar una presencia multinacional para apoyar mejoras en la seguridad, añadió uno de los funcionarios.
Brasil podría desempeñar un papel importante a la hora de comunicar a China y a otros miembros del Consejo de Seguridad de la ONU la importancia de participar en Haití, añadió el funcionario.
Reuters