La Comisión Europea confirmó este viernes que no modificará el calendario de implementación de la histórica Ley de Inteligencia Artificial, desestimando los llamados de grandes tecnológicas y algunos gobiernos a favor de una moratoria. La normativa, pionera a nivel mundial, seguirá su curso legal sin pausas ni periodos de gracia.
“No hay que parar el reloj. No hay periodo de gracia. No hay pausa”, afirmó tajante Thomas Regnier, portavoz de la Comisión, en una rueda de prensa en Bruselas.
El mensaje fue una respuesta directa a las recientes presiones de empresas como Alphabet (matriz de Google), Meta (propietaria de Facebook), y firmas europeas como Mistral y ASML, que han solicitado aplazar varios años la entrada en vigor de las obligaciones regulatorias. Las compañías alegan que los costos de cumplimiento y la complejidad de las exigencias podrían frenar la innovación en un sector clave para la competitividad global.
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Calendario legal sin cambios
La Ley de IA, que entró en vigor en febrero de este año, establece un cronograma escalonado:
- Agosto de 2025: comienzan las obligaciones para los modelos de IA de propósito general.
- Agosto de 2026: entran en vigor las disposiciones para los sistemas de alto riesgo, como los utilizados en salud, transporte o justicia.
La Comisión también adelantó que propondrá antes de fin de año una simplificación de sus normas digitales, con el objetivo de reducir la carga administrativa para las pequeñas y medianas empresas.
Europa frente a EEUU y China
La normativa europea busca establecer un marco ético y seguro para el desarrollo de la inteligencia artificial, en contraste con el enfoque más laxo de Estados Unidos y el modelo centralizado de China. Sin embargo, el liderazgo regulatorio de la UE ha generado tensiones con el sector privado, que teme quedar rezagado en la carrera global por la IA.
A pesar de las críticas, Bruselas insiste en que la regulación es necesaria para garantizar la confianza del público, prevenir abusos y fomentar una innovación responsable.