La petrolera ExxonMobil, la mayor de EE.UU., registró un beneficio de 19.310 millones de dólares (unos 17.600 millones de euros) en el primer semestre, un 17,2% menos en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior, que estuvo marcado por los altos precios de la energía.
Según ha informado este viernes en una nota de prensa, entre enero y junio, ExxonMobil facturó 169.478 millones de dólares, un 17,8% menos que hace un año, cuando esta cifra alcanzó los 206.181 millones impulsada por la cotización del petróleo y el gas tras la invasión rusa de Ucrania así como por el aumento de la producción.
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Si se atienden únicamente a los resultados del segundo trimestre, el beneficio rondó los 7.900 millones de dólares, cerca de un 56% menos en términos interanuales, en tanto que los ingresos ascendieron a 82.914 millones, un 28,3% menos.
Con todo, el presidente y consejero delegado de la compañía, Darren Woods, ha destacado el trabajo desplegado para mejorar la rentabilidad subyacente, un esfuerzo que se refleja en los resultados de abril a junio.
Estos «duplicaron lo ganado en un entorno de precios de las materias primas de la industria comparable hace sólo cinco años«, ha añadido.
Woods también se ha referido a los más de 19.000 millones de dólares de beneficio alcanzado en la primera mitad de este 2023, y ha aseverado que la petrolera va camino de reducir costes estructurales en 9.000 millones al final del año respecto a 2019.
En el segundo trimestre, las menores realizaciones de gas natural y los márgenes de refinación de la industria afectaron negativamente a las ganancias.
No obstante, los resultados se vieron compensados por la ausencia de impactos del mercado de derivados desfavorables de los tres meses previos.
EFE
