El Consejo de la Unión Europea y la Eurocámara alcanzaron este martes un acuerdo provisional sobre el reglamento relativo a los pagos inmediatos en euros en la UE y en el Espacio Económico Europeo, que integran Islandia, Liechtenstein y Noruega, además de los Veintisiete, y que se ejecutarán en cuestión de segundos.
Se trata de un pacto político sobre nuevas normas para garantizar la llegada inmediata de fondos transferidos a cuentas bancarias de clientes minoristas y empresas en la UE, informó la presidencia española del Consejo de la UE en su cuenta en X y la Eurocámara en un comunicado.
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Este acuerdo provisional, que actualiza la legislación de la Zona Única de Pagos en Euros (SEPA), tiene que ser aprobado por el pleno del Parlamento Europeo y por el Consejo (los países) antes de que pueda entrar en vigor.
Entonces, los proveedores de servicios de pago (PSP), como los bancos, que prestan servicios de transferencia en euros, deberán ofrecer también el servicio de transferencias de crédito instantáneas.
Transferencias instantáneas en 10 segundos
Según el acuerdo, una transferencia de crédito instantánea debe ejecutarse independientemente del día o la hora y procesarse inmediatamente, de modo que el importe transferido se acredite en la cuenta de pago del beneficiario en los 10 segundos siguientes a la recepción de la orden de pago.
También se debe informar al pagador en un plazo de 10 segundos si los fondos transferidos se han puesto a disposición del beneficiario.
Además, cuando se envíe una orden de pago para una transferencia de crédito instantánea en euros desde una cuenta de pago que no esté denominada en euros, la entidad bancaria deberá convertir a euros el importe de la transacción de la moneda en la que está denominada la cuenta de pago, inmediatamente después de recibir esa orden de pago.
Con esta iniciativa, los clientes «disfrutarán de opciones de pago más fluidas y las empresas afrontarán costes más bajos, y los sistemas de pagos de la UE en su conjunto serán más competitivos«, destacó el negociador del Parlamento, el eurodiputado neerlandés Michiel Hoogeveen.
Garantías
Los negociadores acordaron que bancos deberán contar con medidas sólidas y actualizadas de detección y prevención del fraude, diseñadas para evitar que se envíe una transferencia de crédito a un beneficiario no deseado como resultado de un fraude o error.
Con este fin, las entidades bancarias que operan en la UE deberán proporcionar inmediatamente y sin cargos ni tasas adicionales un servicio para verificar la identidad del beneficiario al que el ordenante pretende enviar una transferencia de crédito.
Cuando se detecte una discrepancia entre el identificador de la cuenta de pago del beneficiario y el nombre del beneficiario proporcionado por el ordenante, se debe notificar al cliente, y si no lo hace deberá compensar al cliente por cualquier daño financiero.
Como salvaguardia adicional contra el fraude, los bancos deberían permitir a sus clientes establecer un importe máximo para las transferencias instantáneas en euros, con posibilidad de modificarlo fácilmente antes de la siguiente transferencia.
Además, los que ofrezcan transferencias de crédito instantáneas deberán verificar si alguno de sus clientes está sujeto a sanciones u otras medidas restrictivas relacionadas con la prevención del lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
Asimismo, los cargos por las transacciones de transferencias instantáneas en euros no podrán ser superiores a los aplicados a las de crédito en euros.
Por último, los Estados miembros cuya moneda no sea el euro también tendrán que aplicar las normas, cuando las cuentas ya ofrezcan transacciones regulares en euros, después de un período de transición más largo. Ahora bien, habrá una excepción especial para esas cuentas fuera del horario comercial.
EFE