Beneficios industriales chinos siguen cayendo entre enero-agosto 2023, pero el ritmo disminuye

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Foto: Getty Thinkstock

Los beneficios de las empresas industriales chinas registraron una caída de dos dígitos durante los ocho primeros meses de 2023, pero el ritmo de descenso se suavizó ligeramente, ya que una serie de medidas de apoyo han empezado a estabilizar algunas partes de la economía.

La caída del 11,7% interanual de los beneficios se redujo desde la contracción del 15,5% de los siete primeros meses, en línea con las expectativas, lo que podría indicar que algunas empresas están empezando a experimentar una modesta recuperación.

Los datos de la Oficina Nacional de Estadística publicados el miércoles corroboran este dato, ya que los beneficios de agosto registraron un sorprendente aumento del 17,2% con respecto al año anterior. En julio, los beneficios bajaron un 6,7%.

«Estos datos reflejan que la demanda interna se ha estabilizado y que la oferta y la demanda se han recuperado de forma equilibrada», declaró Bruce Pang, economista jefe de Jones Lang Lasalle.

Yu Weining, estadístico de la ONE, afirmó en un comunicado adjunto que «una serie de medidas de fomento de la recuperación macroeconómica» apuntalaron los beneficios del mes pasado.

Los beneficios mejoraron en 30 de los 41 principales sectores industriales durante el periodo, y las pérdidas en la industria de fabricación de materias primas se redujeron significativamente gracias al aumento de los precios de las materias primas y la recuperación de la demanda. La agencia estadística no facilitó datos comparativos de enero a julio.

A medida que Pekín intensifica el apoyo a su economía tras una breve recuperación pospandémica, los últimos datos han mostrado signos de estabilización, con un crecimiento de los préstamos bancarios, la producción industrial y las ventas minoristas en agosto mayor de lo esperado.

Sin embargo, la persistente debilidad del sector inmobiliario, afectado por la crisis y que representa una cuarta parte de la segunda economía mundial, sigue siendo un lastre para el crecimiento.

El mes pasado, los precios de la vivienda nueva en China cayeron al ritmo más rápido de los últimos 10 meses. La relajación de las normas de endeudamiento está dando señales de impulsar las ventas de viviendas nuevas en algunas grandes ciudades como Pekín, pero sigue preocupando que la mejora pueda ser efímera.

La preocupación radica en que la caída de la confianza en el sector inmobiliario podría socavar las perspectivas generales de la demanda para las empresas y la economía.

El desglose de los datos de la agencia estadística indica que aún queda camino por recorrer para que se produzca una sólida recuperación del crecimiento general de los beneficios.

Reuters