Los fabricantes de aviones apuestan por una demanda estable de aviones de negocios en el arranque del mayor salón aeronáutico corporativo del mundo este martes, pero los analistas se muestran cautos sobre el apetito por los vuelos privados debido a los crecientes riesgos macroeconómicos y al desvanecimiento del auge inducido por una pandemia.
La feria anual de aviones corporativos de la Asociación Nacional de Aviación de Negocios (NBAA) arranca en Las Vegas en un contexto de persistentes problemas en la cadena de suministro, tasas de interés elevadas, un panorama económico incierto y una escalada de las tensiones geopolíticas en medio del conflicto militar en Oriente Medio.
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La aviación privada experimentó un auge durante la pandemia, tanto en usuarios como en compradores, ya que los ricos tomaron el control de sus viajes debido a la preocupación por la salud pública.
Aunque esas preocupaciones se han disipado y se ha reanudado el servicio aéreo comercial en rutas clave, los ejecutivos de la industria han dicho que no ven que la demanda se ralentice.
Wall Street se muestra cauteloso
«Si la situación entre Israel y Hamás empeora, los precios del petróleo subirán y la economía se ralentizará. Ese podría ser un factor que afecte a la demanda», afirmó Cai von Rumohr, analista de TD Cowen. «Al fin y al cabo, es un negocio cíclico».
Según la NBAA, se espera que grandes nombres como Bombardier, Textron, Embraer y Boeing presenten sus últimos modelos en la feria.
Textron presentó el lunes su nuevo avión de negocios Cessna Citation CJ3 Gen2, mientras que Embraer desveló la semana pasada su avión de negocios Phenom 100EX, el último de la serie Phenom 100.
«Estamos satisfechos con las conversaciones que estamos manteniendo con nuestros clientes y esperamos que la feria sea un gran éxito», declaró un portavoz de Textron Aviation en un comunicado enviado por correo electrónico.
Bombardier también dijo el lunes que detallará el progreso de las pruebas de vuelo de su avión Global 8000, que dice que será el avión de negocios más rápido del mundo.
«Seguimos observando una creciente demanda mundial de nuestra familia de aviones BBJ (Boeing Business Jets)», dijo Boeing.
El domingo, el fabricante de motores Honeywell estimó un crecimiento del 10% en las entregas de nuevos motores de reacción para aviones de negocios en 2024 y se unió a varias empresas del sector para subrayar la fortaleza de la demanda mundial de nuevos motores de reacción en el segmento.
Bombardier, como proveedor exclusivo de aviones de negocios con apalancamiento financiero, es el más expuesto a cualquier debilidad de la demanda, seguido de Textron, dijo en una nota el analista de JP Morgan Seth Seifman.
Según Adam Cowburn, director gerente de Alton Aviation Consultancy, se espera que los fabricantes sigan registrando una sólida cartera de pedidos y una relación entre libros y facturas superior a 1,00, aunque probablemente no tan fuerte como la de hace 12 o 18 meses.
El ratio libros y facturas es un indicador de la demanda futura, y un ratio superior a 1 se considera saludable.
Cowburn cree que el mercado acabará situándose en niveles estructuralmente superiores en un 15% a los anteriores al inicio de la pandemia del COVID-19.
En tanto, los observadores del sector esperan que se anuncien nuevos pedidos de aviones en el evento de la NBAA. Se espera que la compañía de jets privados Flexjet haga un gran pedido y los analistas prevén que Bombardier sea el probable ganador.
«Es muy probable que Textron, Dassault Falcon y Bombardier anuncien pedidos de flotas, dadas sus posiciones relativamente fuertes entre los clientes de programas fraccionados«, dijo Rolland Vincent, consultor y fundador del servicio de previsión de aviación de negocios JetNet.
La propiedad fraccionada es un acuerdo en el que varios propietarios comparten el uso y los costos de compra y explotación de un avión privado.
Sin embargo, Gulfstream Aerospace, de General Dynamics, uno de los principales fabricantes de aviones de negocios, declaró el lunes que no participará en el evento.
Reuters
