La Audiencia Nacional de España suspendió el lunes su propia orden de bloquear los servicios de la aplicación de mensajería Telegram en el país a la espera de un informe policial sobre el impacto que la prohibición temporal tendría en los usuarios.
El viernes, el juez Santiago Pedraz había acordado suspender los servicios de Telegram en España mientras investigaba las denuncias de varios medios de comunicación de que la aplicación permitía a los usuarios subir sus contenidos sin permiso. La suspensión debía entrar en vigor el lunes.
Pero Pedraz decidió el lunes paralizar la ejecución de la orden y, en su lugar, encargó un informe a la Policía Nacional sobre «la plataforma Telegram (características, etc.), así como la incidencia que pueda tener sobre los usuarios dicha suspensión temporal», según un comunicado judicial.
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Empresas de medios de comunicación como Atresmedia, Mediaset, Egeda y Telefónica han demandado a Telegram por lo que describen como una infracción continuada de los derechos de autor en la aplicación. Telegram se ha negado a comentar las acusaciones.
Durante su investigación, Pedraz solicitó información sobre las identidades de los usuarios sospechosos de compartir ilegalmente contenidos protegidos desde las Islas Vírgenes, un territorio británico de ultramar en el Caribe donde Telegram, fundada por el multimillonario de origen ruso Pavel Durov, está registrada como empresa.
Según el tribunal, las autoridades no han atendido su petición.
La asociación española de consumidores celebró «que las reacciones a su medida hayan llevado al magistrado a reflexionar sobre el enorme impacto que tendría» y confió en que el informe policial le lleve a revocar la orden.
Telegram es el cuarto servicio de mensajería más utilizado en España, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Lo utiliza casi el 19% de los residentes en España encuestados por la CNMC.
Con información de Reuters.
