Rusia advirtió este lunes de que la negativa de la Unión Europea a reconectar el banco ruso Rosseljozbank al sistema Swift «complica» el cumplimiento del acuerdo del grano, que permite la exportación de productos agrícolas ucranianos por el mar Negro y que fue prolongado por dos meses la semana pasada.
«Esto complica el cumplimiento de la parte rusa de la iniciativa o pacto del mar Negro», afirmó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, al comentar las declaraciones de su homólogo de diplomacia europea, Peter Stano, acerca de que las sanciones de la UE a los bancos rusos serán levantadas sólo cuando acabe la guerra en Ucrania.
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En su rueda de prensa diaria, Peskov indicó que los esfuerzos de la ONU y su secretario general, António Guterres, «chocan con la postura poco constructiva de algunos occidentales».
Al mismo tiempo, destacó que continúan los contactos para el cumplimiento pleno de los acuerdos, aunque subrayó que «dos meses es un período tiempo breve que terminará bastante rápido».
Rusia denuncia que sus exportaciones, cuya facilitación fue acordada con Naciones Unidas y Turquía en paralelo al acuerdo para dar salida al grano ucraniano, afrontan dificultades sobre todo por los efectos colaterales de las sanciones que Occidente por su «campaña militar» en Ucrania.
Además de la reconexión del banco agrícola Rosseljozbank al Swift, el Kremlin demanda la reanudación de los suministros de maquinaria agrícola, así como de repuestos y servicios para ella, y la eliminación de restricciones en materias de seguro y libre acceso a los puertos.
Pide también la puesta en funcionamiento del amonioducto Togliatti-Odesa, paralizado desde el comienzo de la «campaña militar» rusa en Ucrania, y el desbloqueo de las cuentas y activos en el extranjero de las compañías rusas vinculadas con la producción y el transporte de alimentos y fertilizantes.
EFE
