Los grandes comerciantes globales de materias primas que surgieron como primeros compradores de crudo venezolano luego de que Estados Unidos flexibilizara las sanciones en octubre, ahora están suministrando a la estatal PDVSA combustibles para motores y diluyentes para su producción de petróleo pesado, según documentos vistos por Reuters.
Venezuela está tratando de priorizar las importaciones de combustibles tras la flexibilización de las sanciones para evitar una nueva ola de escasez de gasolina y diésel, según los documentos y fuentes.
El suministro complementa intercambios de petróleo previamente concertados por PDVSA con algunos socios de empresas mixtas, entre ellos la estadounidense Chevron, la italiana Eni y la española Repsol, así como acuerdos en los últimos años en medio de sanciones con socios estratégicos como Irán.
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Con las elecciones presidenciales programadas para el segundo semestre de 2024, el objetivo de PDVSA es reponer sus bajos inventarios de combustibles y diluyentes, lo que ha creado una necesidad frecuente de importaciones y vulnerabilidad a cualquier aumento de la demanda, dijeron las fuentes consultadas.
Los venezolanos se han enfrentado intermitentemente a la escasez de gasolina y diésel en los últimos años, mientras que los precios subsidiados han aumentado.
PDVSA importó en noviembre un promedio de 54.000 barriles por día (bpd) de nafta pesada y mezclas de gasolina suministradas por Chevron y Repsol, la cifra mensual más alta desde enero.
Ese volumen excluye las importaciones de petróleo ligero y condensado de Irán, que han disminuido en la segunda mitad del año, según documentos y datos de seguimiento de barcos de LSEG.
Para diciembre está prevista la importación de al menos un volumen similar de nafta pesada de Vitol, según los documentos, que muestran que algunas negociaciones corresponden a intercambios de cargamentos.
Vitol fletó un tanquero para recoger un cargamento de 1 millón de barriles de crudo pesado venezolano en la segunda quincena de diciembre, según mostraron los datos de LSEG. Vitol y Trafigura han comprado desde octubre crudo y fuel oil venezolanos a pequeñas empresas que están actuando como intermediarios en las ventas.
Fuente: Reuters