La actividad económica en Argentina experimentó en mayo pasado un descenso del 0,1% frente a abril último, informaron este martes fuentes oficiales.
El dato divulgado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), que sirve como anticipo provisional para medir la variación trimestral del producto interno bruto (PIB), confirma la tendencia contractiva que experimenta la economía argentina desde abril pasado, cuando la actividad retrocedió 1,8% en relación a marzo.
El informe indica asimismo que en mayo la actividad económica cayó 5,5%, en comparación con igual mes de 2022, sumando 2 meses consecutivos en negativo.
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Los datos del Indec revelan que, de 16 actividades incluidas en el indicador, la mayoría de los sectores productivos experimentaron una mejora interanual en mayo, entre las que se destacaron la minería (5,3%) y la de hoteles y restaurantes (4,1%), mientras que el comercio (2,8%) fue la actividad con mayor incidencia positiva en el indicador.
Sin embargo, el índice cayó en mayo por el arrastre de la agricultura y la ganadería, que, seriamente afectado por la sequía y con fuerte incidencia en la actividad económica total de Argentina, se desplomó 43,8% interanual en el quinto mes del año.
También registró una fuerte caída la actividad de la pesca, con un derrumbe interanual del 22,6%.
Argentina acumuló en los primeros 5 meses del año una merma en su actividad económica del 1,3%, según el informe oficial difundido este martes.
El PIB de Argentina acumuló el año pasado un avance del 5,2%, muy por debajo del repunte del 10,4% de 2021.
Para 2023 la pauta de crecimiento incluida en el Presupuesto había sido del 2%, pero los economistas privados que mensualmente consulta el Banco Central argentino para su informe de expectativas pronostican que este año la economía argentina se contraerá 3%.
EFE
